Damos la bienvenida, con la primera salida de nuestra agenda .
En plena estación de otoño,el lugar escogido es...la Dehesa del Camarate también llamado "El bosque encantado".
Uno de los tesoros botánicos más preciados de cuanto posee el Parque Nacional de Sierra Nevada.
Alberga el mejor y más completo bosque mixto de la provincia de Granada y de gran parte de Andalucía.
Situado en Lugros, nos trasladamos en nuestros vehículos, sobre las 8h para llegar con tiempo.
Pero antes, hacemos un alto en el camino, para desayunar en Purullena.
¡Ya todos listos! Nos dirigimos a Horcajo del Camarate, en busca del parking ,una explanada bastante amplia para aparcar.
En fines de semana, no se permiten circular con vehículos por el sendero,así que no hay más remedio que coger el minibus, por unos tres euros por persona,si no quieres andar mucho.
Esa fue nuestra opción ,coger el minibus que salía a las diez y media de la mañana.
Nos dejó muy cerca de la ermita abandonada,pero muy concurrida de la visita de ganado vacuno que pastan a sus anchas por toda la Dehesa.
Comenzamos nuestra andadura a pie ,con las mochilas cargadas ,paso a paso, contemplando el paisaje lleno de colorido,amarillos, ocres,rojizos y verdes,aunque este año ,no está del todo en su apogeo y esplendor.
Por la sequía y climatología que estamos padeciendo este año,pero siempre merece la pena la subida y disfrutar de la naturaleza en buena compañía.
Es la ocasión de ver y sacar provecho con nuestras cámaras todo lo que nos rodea,nunca es igual, ya que ese día lucía un sol espléndido.
Para resguardarnos del sol intenso del mediodía,una merecida parada, bajo la sombra de algún árbol o algunos valientes que llegaron hasta el tentadero al final del camino, para almorzar tranquilamente.
Descansados, volvemos por el camino de regreso, con las mochilas algo más ligeras, pero con las tarjetas llenas de imágenes de este maravillo lugar.
Foto de grupo en la ermita abandonada.
La ermita ..comienzo de nuestra ruta.
Amarillos y ocres
El río fluye con menos agua que otros años.
Los colores otoñales se entremezclan.
También es ruta de ciclistas.
Panorámica el tentadero.
Hasta la meta del tentadero ,solo llegaron tres.
Camino de regreso visitamos las Cárcavas de Marchal.
Bonitos colores en las cumbres.
Y lo más inesperado ...un zorro en la cumbre.
Los frutos rojos en otoño.
Riachuelos a cada paso.
El bosque encantado.
Vistas de las cumbres y algo de nieve.
La vaca como en su casa.
La cabra montés de la finca junto al parking.
Robado de Lucas en plena acción .
Vista del paisaje en lo más alto del camino.
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